Nuestras plantillas de borreguillo son un producto para regular la temperatura totalmente natural. A pesar de su gran capacidad para aumentar la temperatura, los pies no se sobrecalentarán en ningún momento. Las plantillas son cálidas, cómodas y están hechas con un material extremadamente efectivo y suave, que genera calor de una manera natural.
¡Estas plantillas son lo más cómodo que te puedas imaginar! También son indispensables para las personas que quieran abrigar sus pies de un modo efectivo. Su material lujoso y natural calienta los pies y además ayuda a regular su temperatura.
Se adaptan a todo tipo de calzado siempre y cuando tengas en cuenta que ocupan algo de espacio en el interior. Si buscas unas plantillas finas, pero que aun así calienten bastante, nuestras plantillas de forro polar o fieltro son una buena opción.
Hay muy pocas que no sean gruesas e incómodas, y los pocos productos que quedan no tienen una calidad aceptable, ni mucho menos satisfactoria. Para usar plantillas térmicas necesitas unos zapatos muy gruesos y robustos, ya que no entran en los zapatos finos y elegantes. Además, la mayoría solo tiene una opción de calor para seleccionar.
El borreguillo ofrece calidez naturalmente, regula la temperatura y es suave; unas ventajas que compensan de sobra por el precio. Con unas plantillas de borreguillo podrás realizar cualquier actividad al aire libre con independencia del frío que haga. Este producto se puede cortar a medida, así que solo tendrás que elegir entre uno de los dos tamaños, que cubren las tallas de la 20 a la 35 y de la 36 a la 47.
Las plantillas de borreguillo no se lavan, pero hay un producto especial que ha sido creado para limpiar este material. Si usas cualquier otra cosa, se estropearán antes. Pero, si no puedes conseguir el producto, prueba con un champú suave.
Cuentan con un elegante diseño en una combinación de los tonos blanco y crema. Para introducir las plantillas en los zapatos, usa unas tijeras y recórtalas siendo las líneas que hay en la parte posterior según tu talla. Después mételas en el interior de tus zapatos y ya estarás listo para desafiar hasta al más crudo de los inviernos.